La fama de Las Vegas no se ha construido solamente con unas cuantas leyes permisivas. El cine y la televisión han tenido mucho que ver en la difusión de esa imagen de lugar en el que todo puede pasar: hacerte millonario, casarte con una desconocida o descender a los infiernos del alcohol y las drogas. Todo eso pasa en las películas de Las Vegas.
Hace un año por estas fechas pude conocer la ciudad del pecado por excelencia y responder a la pregunta de ¿Qué hacer en Las Vegas? Pero todo eso y más lo habíamos aprendido en el cine. La ciudad sirve de escenario a infinidad de películas y series, a menudo formando una parte imprescindible de la trama, es decir, que la historia no podría ser intercambiable a otra ciudad, sino que requiere de sus casinos, sus espectáculos, su vida disoluta o sus capillas para bodas exprés.
El famoso dicho de «Lo que pasa en Las Vegas se queda en Las Vegas» no se cumple, en realidad lo que pasa en Las Vegas se retransmite a todo el mundo en pantallas grande.
Viva Las Vegas y las comedias románticas
Todo empezó con Elvis cantando en una de las comedias románticas más populares de los 60s, Viva Las Vegas, a la que acudía para participar en el Grand Prix automovilístico y acababa casándose con Ann-Margret en la pequeña iglesia del Oeste, Little Church of the West.
Mucho después las relaciones cambiaron y Camerón Diaz y Ashton Kutcher comenzaron la suya al revés, casándose en una borrachera para luego enamorarse, y con premio millonario de casino de por medio. Sucedía en la película What happens in Vegas… Precisamente parte de ese dicho de «Lo que pasa en Las Vegas…» aunque en España se tradujo por Algo pasa en las Vegas intentando aprovechar el tirón de Algo pasa con Mary.
Aquí entre nosotros, la peli no era muy buena, y tampoco lo era Honeymoon in Vegas, Luna de miel en Las Vegas, protagonizada por Nicolas Cage y Sarah Jessica Parker, cuyo mayor atractivo era una banda sonora de versiones de Elvis cantadas por Bruce Springsteen, Billy Joel o Brian Ferry.
Desfalco en los casinos
Mucho mejores son las películas de Las Vegas que centran la atención en el mundo de los Casinos y que han mostrado al mundo los mejores hoteles de la ciudad. En Ocean’s Eleven, George Clooney, Brad Pitt, Matt Damon y sus colegas, preparan un atraco de película en Las Vegas, para robar nada menos que tres de los casinos más emblemáticos de la ciudad, el Mirage, el MGM Brand y el Bellagio con su famosas fuentes y sus interiores de lujo. Además de mostrar estos hoteles, la película está plagada de panorámicas de Las Vegas Strip, el tramo de Las Vegas Boulevard donde se reúnen los principales hoteles, además del famoso cartel de bienvenida, el aeropuerto, etc.
La siguiente película de la saga se traslada a Europa, pero en Ocean’s Thirteen la banda vuelve a la ciudad de los casinos para enfrentarse nada menos que a Al Pacino en un nuevo gran hotel de Las Vegas Strip. Las escenas de este nuevo casino en construcción se rodaron en el Palazzo, mientras que el nuevo y lujoso edifico iba ser el Wynn y acabó por rodarse en un estudio de Los Ángeles. Eso sí, el escenario y las vistas de Las Vegas Strip están rodadas desde el fabuloso piso 64 del hotel Mandalay Bay, y la oficina en la que Andy García interpreta al director del Bellagio es efectivamente el Bellagio.
Ya se sabe que no fueron los primeros, en el original Ocean’s Eleven, el Rat Pack de Frank Sinatra, Dean Martin y Sammy Davis Jr., interpretaban a excombatientes de la guerra mundial que se reunían para atracar cinco casinos a la vez (chúpate esa, Clooney): Los ya desaparecidos Riviera, Desert Inn y Sands, hogar de las actuaciones de los artistas en la vida real, y dos clásicos que aún se pueden visitar, el Sahara y el mítico Flamingo que es actualmente el más antiguo de Las Vegas Strip.
La manera de estafar al casino en 21 era simplemente utilizar la estadística para ganar al Black Jack. Unos timadores dirigidos por el profesor Kevin Spacey lo intentaban en las instalaciones del Hotel Casino de Planet Hollywood.
En el Casino de Scorcese, con Robert de Niro y Sharon Stone, era la mafia la que desfalcaba al estado y los jugadores. La trama se desarrollaba en el casino ficticio Tangiers, que en realidad era el Riviera, una clásico casino de las Vegas Strip que duró hasta 2010 y que en su día también estuvo dirigido por la mafia.
Los resacones
No es que la bebida sea barata precisamente, pero mientras juegas en el casino te la ofrecen gratis y además se puede beber en cualquier lado, tal vez por eso es una ciudad propensa a las borracheras históricas de las películas de Las Vegas.
Recientemente han sido los protagonistas de la saga Resacón en Las Vegas los que han puesto a prueba la fama de desmadre de la ciudad. La primera película se rodó principalmente en el famoso Caesars Palace, aunque sus aventuras también discurrían en el Mandalay Bay, el Luxor o los bares de la calle Freemont. Eso sí, para las escenas más disparatadas tuvieron que recrear un hotel en un plató de Los Ángeles para no destrozar los hoteles. Igual que en la saga de Ocean’s, la segunda entrega del Resacón se alejó de la ciudad, pero en la tercera volvieron a promocionar los atractivos alcohólicos y desenfrenados de Las Vegas y el Caesar’s Palace.
No tan divertido era el alcoholismo de Nicolás Cage en Leaving Las Vegas. El protagonista acude a la ciudad dispuesto a suicidarse lentamente a base de alcohol y entre borrachera y resaca podemos ver los exteriores de hoteles como el Excalibur, el Mirage o el Motel Saharan. Apenas los exteriores, porque fue una película de bajo presupuesto en la que ni siquieran tenían dinero para solicitar permisos de rodaje en Las Vegas Boulevard, por eso las escenas se rodaban entre el tráfico y a la carrera antes de que llegara la policía a impedirles la filmación.
Una más: el elocuente título de Miedo y Asco en Las Vegas se centraba más en las drogas que en el alcohol, con un maletero de coche con un muestrario de estupefacientes como para inaugurar la casa museo del Cartel de Medellín.
En todas ellas no pueden faltar los clubs de striptease o espectáculos eróticos como los que reflejaba fielmente Showgirls, y aunque en la película está llena de exteriores rodados en la ciudad como la reconocible pirámide del hotel Luxor, los espectáculos fueron rodados en platós.
Más películas en Las Vegas
El listado de películas de Las Vegas es interminable, y las estrellas que han rodado por su boulevard, también. Warren Beaty interpretó a Bugsy, en la película del mismo nombre, uno de los mafiosos fundadores de lo que hoy es Las Vegas. También en la saga de mafiosos por antonomasia, El Padrino, se aprovechó el aspecto retro del Hotel Tropicana para filmar la visita de Al Pacino a los negocios de la familia.
Además, Tom Cruise se llevaba a su hermano autista Dustin Hoffman a ganar dinero en Las Vegas en Rain Man, y Robert Redford proponía a Demi Moore su famosa Proposición Indecente. Sandra Bullock se colaba con más pena que gloria en un certamen de Miss Universo celebrado en Las Vegas en la segunda parte de Miss Congeniality (Miss Agente Especial) y Sylvester Stallone combatía en el casino MGM encarnando a Rocky Balboa.
Sean Connery se presentaba en la ciudad en el papel de James Bond en Los Diamantes para la eternidad; y Michael Douglas, Robert de Niro, Morgan Freeman y Kevin Kline se embarcaban en un viaje a lo Imserso en Last Vegas o Plan en Las Vegas. Por no hablar del momento en que Jack Nicholson presencia el ataque de los extraterrestres a Las Vegas en Mars Attacks!
Pero para ciencia ficción, la recreación de Las Vegas en el año 2049 que pudimos ver en la reciente secuela de Blade Runner. Ya podéis visitarla antes de que acabe así, pero antes, recrearos con las películas.