Las cervezas en Tailandia se sudan al mismo tiempo que se beben, dudo que lleguen a pasar por el estómago, pero por eso mismo la rehidratación continua es de obligado cumplimiento para el turista y eso permite, además de sobrevivir, conservar un buen número de momentos refrescantes y memorables.
Durante nuestro viaje degustamos todo lo posible las cervezas locales, Chang, Shintag y Tiger, a las que solo fuimos infieles con las Anchor de Camboya. Después de horas de caminatas al calor húmedo y bajo un sol abrasador, no había mejor alternativa que un buen botellín fresco de cerveza. Entiéndasenos, cualquier guía y el propio Ministerio de Sanidad advierte contra el agua, los batidos de fruta, los refrescos con hielo y cualquier otra bebida susceptible de provocar trastornos gastrointestinales. Y quiénes somos nosotros para contradecir a las autoridades sanitarias.

En Khao San Road teníamos la costumbre de beber apostados cual francotiradores en la balconada del segundo piso de un bar de moda, para observar el ir y venir de la fauna que pueblas aquellas calles.
También en Bangkok, derrotados por el cansancio y el calor, encontramos un lugar junto al mercado de amuletos y frente al río, donde nos sirvieron unas cervezas con la espuma helada. Como suena, sobre la caña de grifo vertieron desde una heladera una espuma helada de cerveza como si fuera un sorbete, que por supuesto no sabía a nada, pero que tuvo el efecto de echar agua helada al radiador. Creo que pudimos ver el vapor saliendo de nuestros cuerpos.
En Chiang Mai, alejándonos del tumulto del mercadillo, nos encontramos bebiendo en un pequeño y viejo bar junto a unas señoras que preparaban afanosamente adornos florales para algún templo de la ciudad, mientras nos sonreían y se metían güisquis dobles entre pecho y espalda.
En Phuket nos tomamos alguna que otra disfrutando del paisaje del Mar de Andamán y ese extraño color que adquiere el cielo cuando se aproxima la siguiente tormenta.
En definitiva, que nos quedamos con una colección de cañas y vistas que mejoran el sabor de la cerveza.