Uno de los objetivos que llevábamos en mente al visitar Tailandia, era disfrutar de esas playas paradisíacas que lucen sus aguas cristalinas en los folletos turísticos y en las fotos de la gente a la que envidiamos. Las circunstancias nos impidieron visitar todas las que teníamos planeadas, pero sí que pudimos apreciar algo en Phuket.